Vitalidad
La vitalidad es una sensación agradable y satisfactoria que enmarca la realización de las actividades con positivismo y alegría, haciendo que todo en la nuestra existencia valga la pena. La vitalidad está indiscutiblemente ligada a una buena salud física, a la ausencia de cansancio y fatiga y a una positiva actitud mental. En otras palabras, es el equilibrio entre la fortaleza física y mental. En el lado opuesto está la baja vitalidad y se asocia frecuentemente a la deficiencia inmunológica, al dolor, a conflictos emocionales internos, estrés y todos aquellos comportamientos que son consecuencia de una salud emocional tensa.
El término vitalidad alude al sentimiento de estar y sentirse vivo, con energía y entusiasmo por todo aquello que se hace.
La vitalidad suele estar asociada con la juventud, pues las personas jóvenes suelen estar más llenas de energía y tienen más interés en experimentar y compartir constantemente con su entorno. Sin embargo, con la llegada de la madurez la vitalidad empieza un lento pero progresivo declive. Las cosas que antes entusiasmaban ya no lo hacen y pasan de ser un motivo de empuje y alegría a convertirse en obligaciones y responsabilidades. No obstante, si se mantiene una actitud positiva, la mente y el cuerpo activos, se podrá mantener la energía y vitalidad para enfrentarse a la vida independientemente de la edad que se tenga.
- Los cambios de estación pueden influir para que en algunos momentos se sienta cansancio y falta de motivación.
- El estilo de vida también es determinante en el grado de vitalidad que se tenga. Por muy joven que se sea, si se tiene un día a día ajetreado, aflora el agotamiento por trabajo, se lleva un ritmo de vida sin moderación y una alimentación poco equilibrada, es probable que nuestra vitalidad baje.
Ayudar al organismo a recuperar o mantener la energía de forma duradera a pesar de la edad, es importante:
- Aporte de nutrientes que apoyen la dieta equilibrada
- Realizar ejercicio de forma regular
- Buenos hábitos de sueño
- Mantenerse alejado del tabaco y el alcohol
- Intentar mantener una actitud positiva
- Compartir con los demás el tiempo y actividades de ocio
- Estar en contacto con la naturaleza
- Ponerse metas e intentar cumplirlas
- Aprender a envejecer y aceptar los años como una etapa más del desarrollo personal