El frenético estilo de vida actual que debemos afrontar, sumado a las características de la salud femenina como la menstruación, la menopausia y sus circunstancias, suelen provocar alteraciones tanto físicas como emocionales en las mujeres.
Para ello buscar un equilibrio entre la salud física y la emocional se hace imprescindible. Y en ese contexto más vale explorar alternativas naturales que ayuden a aumentar el bienestar, a incrementar la autoestima y sacar lo mejor de una misma cada día.
Sumado a otros hábitos saludables, los nutrientes como la onagra, la vitamina E, el ácido fólico, las vitaminas del grupo B, los antioxidantes y reconstituyentes entre muchos más, podrían ayudar a activar el metabolismo, a fortalecer las defensas y a potenciar la belleza natural femenina. No sólo para ayudarlas a sentirse y verse mejor sino como apoyo para mantener su ritmo de vida.