Ingredientes por persona
- 1 plátano
- 40 g de copos de avena
- 1 c/p de cacao en polvo
- 150-200 ml de leche o bebida vegetal (nuestra receta está elaborada con leche semidesnatada)
- 30 g de proteína de suero de leche
- 1 c/s de nibs de cacao
- 2 nueces
- ½ manzana Fuji (8-10 rodajas finas)
- Puñado de arándanos frescos
Elaboración
Para ablandar la avena te aconsejamos preparar esta receta en 2 etapas. La primera se prepara la noche anterior y la segunda a la mañana siguiente.
- En un plato, aplasta el plátano con la ayuda de un tenedor y pásalo a un bol/tazón/cuenco.
- Añade el cacao y mezcla bien hasta que se integren ambos ingredientes. Este paso ayudará a que no queden grumos de cacao cuando añadas la leche.
- Incorpora los copos de avena y parte de la leche y mezcla bien.
- Esta es la primera parte de la receta. Es el momento de dejar la mezcla de plátano, leche, avena y cacao reposando en la nevera toda la noche.
- A la mañana siguiente disuelve la proteína en polvo con el resto de la leche y mezcla con lo preparado la noche anterior.
- Limpia y corta por la mitad la manzada y córtala en rodajas finas. Desmenuza las nueces con los dedos para que queden trozos desiguales. Prepara los arándanos y los nibs de cacao.
- Por último, es hora de hacer una buena presentación, repartiendo los ingredientes por encima como puedes ver en la foto. Aunque este paso no es obligatorio y puedes añadirlos sin seguir ningún criterio estético ¡Estará rico igual!
Notas:
Si tienes problemas digestivos, cocinar la avena remojada tras el reposo nocturno con la leche es una muy buena opción.
La proteína es opcional. Del mismo modo, puedes utilizar una proteína vegetal. Aunque deberás tener en cuenta el sabor, ya que la que hemos utilizado para elaborar esta receta es neutra y no altera el resultado final.
La cantidad de leche puede variar en función de lo espeso que te guste tomar este rico desayuno.
Las variaciones para esta receta son numerosas. Puedes añadir semillas de chía para dar espesor y un aporte extra de fibra. También puede añadir semillas de cáñamo o cualquier otra semilla. Puedes cambiar las nueces por otro fruto seco, la fruta por la que encuentres de temporada... en fin, lo que se te ocurra.
Lo que consideramos un “delito” eliminar son los nibs de cacao. En nuestra opinión, lo que aporta diferencia y da personalidad, tanto en textura como en sabor, a la receta. Y en cuanto a este ingrediente, para los más golosos no está de más recordar que también es posible encontrar los nibs de cacao edulcorados.
Y para ti ¿Cuál es el desayuno perfecto?