¿Pensabas que de los arándanos solo se podían hacer recetas dulces? Pues, no. Los arándanos, al igual que todas las frutas, dan mucho juego en la cocina y con ellos se pueden preparar deliciosas recetas saladas.
En nuestro país, la forma que tenemos de encontrar arándanos rojos americanos es principalmente como fruta deshidratada. Con ellos solemos preparar mueslis, bizcochos, los ponemos en el yogur o hacemos barritas energéticas.
Pero, más allá de las clásicas recetas dulces, con los arándanos secos podemos también preparar deliciosas recetas saladas. Y no nos referimos a echar unos cuantos en una ensalada, que también, nos referimos a ir más allá y sacar el máximo partido a este maravilloso fruto.
Esta semana queremos compartir con vosotros 2 recetas saladas hechas con arándanos secos americanos. O lo que es lo mismo, con cranberries.
Calabaza rellena
Receta de temporada 100%. A parte de consumirla en crema, esta receta nos enseña otra forma de comer calabaza, un hortaliza rica en carotenoides, principalmente luteína. Al dulzor de la calabaza se le une la acidez del arándano, para completar esta
Ingredientes para 4 personas
- 2 Calabazas tipo cacahuete
- 1 cebolla mediana
- 200 g de champiñones
- 150 g Arroz basmati
- 150 g Legumbres cocidas (escoge la que más te guste)
- 2 puñados de Arándanos secos
- 1 puñado de Pipas de calabaza
- 1 C/S de semillas de sésamo
- Aceite de oliva virgen extra (si quieres dar un toque exótico puedes usar otro tipo de aceite como sésamo o cacahuete)
- Sal
- Pimienta
Elaboración
- Corta las calabazas por la mitad, de forma longitudinal, retira las semillas y coloca las mitades en una bandeja para horno. Cocina durante 45-60’ a 200oC. Sabrás que están hechas cuando al pincharlas notes la carne blanda.
- Mientras tanto, pela y corta la cebolla a trozos pequeños. Limpia y corta a láminas los champiñones. Rehoga con un poco de aceite. Añade los arándanos secos y las pipas un rato antes de apagar el fuego.
- Hierbe el arroz y cuela una vez cocido.
- Una vez hechas las calabazas, deja enfriar y retira la pulpa con la ayuda de una cuchara. Procura dejar un pequeño margen de pulpa (aproximadamente un dedo). Así evitarás romper la cáscara, que habrá quedado muy blanda.
- Con la ayuda de un tenedor, chafa la pulpa y añádela a la sartén, con la cebolla y los champiñones. Añade también el resto de ingredientes (legumbres, arroz, semillas de sésamo). Salpimienta y saltea unos minutos.
- Rellena las calabazas con la mezcla anterior y sirve. Puedes gratinar con un poco de queso rallado por encima, si quieres.
TIPS:
- Puedes sustituir el arroz por quinoa o por una mezcla de arroces.
- Puedes sustituir los champiñones por cualquier otra seta, por ramitas de brócoli, bimi o espinacas.
- Las pipas se pueden sustituir por cualquier otra semilla o fruto seco.
Queso vegano con arándanos
Podíamos haberte ofrecido una receta con queso convencional pero como nos gusta ofrecer cosas diferentes, aquí tienes una original idea para preparar un particular queso de untar.
Ingredientes
- 150 g Anacardos crudos
- 2 c/s de Levadura de cerveza desamargada o levadura nutricional
- 2 c/s de Zumo de limón
- 2c/p de Aceite de coco
- ½ cucharadita de Sal
- 35 g de Arándanos secos
- 35 g de Nueces mondadas
- Cebolla frita (opcional)
- Agua
Elaboración
- Pon los anacardos en remojo con agua un mínimo de 8 horas.
- Antes de empezar, si el aceite de coco está sólido, derretirlo poniéndolo unos segundos al microondas.
- En un procesador de alimentos potente introduce los anacardos escurridos, la levadura de cerveza, el zumo de limón, el aceite de coco derretido y la sal. Bate hasta que la mezcla quede con textura cremosa.
- Pica los arándanos y mezcla con la crema que acabas de hacer.
- Forra un recipiente rectangular (un tupper) con film, extiende la mezcla por encima y lo pones a enfriar en la nevera durante unas horas.
- Pica las nueces, con un cuchillo o pásalas unos segundos por la picadora.
- Saca el queso del recipiente con la ayuda del film con el que lo las guardado y esparce las nueces picadas por encima. Si decides poner cebolla frita, mezcla con las nueces y esparce.
- Pon otro trozo de film para cubrir el queso por encima, aplana un poco con la mano para que las nueces queden pegadas y dale la vuelta, como una tortilla. Ahora la parte de las nueces queda debajo y la parte sin nueces arriba.
- Retira el film que ahora está encima. Ves enrollando. Tiene que quedar en forma de rulo rebozado con las nueces picadas. Deja reposar en la nevera unas horas más.
Ya tienes listo tu queso vegano para untar unas tostaditas o lo que te apetezca.
TIPS:
- Puedes sustituir las nueces por otro fruto seco, pistachos o almendras, por ejemplo. Pero sin sal.
- La forma que te hemos presentado aquí es una idea. Puedes hacer bolitas de queso, rebozarlas con las nueces y presentarlo en formato individual.
