Hace poco más de un año compartíamos con vosotros una receta con una versión de la bruschetta. Y como nos hemos hecho fans de su sabor, hemos ido más allá y la hemos empezado a fusionar con otras recetas.
Tradicionalmente dulces, la realidad es que se pueden hacer tantas versiones de los gofres como a uno se le ocurra. En esta ocasión hemos pensado hacer algo diferente y hemos apostado por una receta salada que dará mucho juego.
A ver qué te parece.
Ingredientes:
- 100 g Harina de avena o copos de avena
- 1 c/p de Levadura
- 1 Huevo
- 100 ml de Leche o Bebida vegetal
- 1 pizca de Sal
- 1 c/s de Bruschetta
- 1 c/p de cebolla en polvo
- 2 c/p de Parmesano en polvo
- Mozzarella rallada
Preparación:
Si utilizas los copos de avena, primero tienes que triturarlo con un procesador de aspas largas hasta obtener harina.
Tamiza la harina (si te queda la fibra en el tamiz, incorpórala al finalizar el tamizado), la levadura y la sal sobre un bol. Añade la bruschetta y la cebolla en polvo y mezcla.
Bate el huevo y mezcla con la leche y el parmesano.
Mezcla líquidos con sólidos hasta integrar todos los ingredientes.
Pon la gofrera a calentar y una vez coja temperatura engrasa con aceite de oliva extendiendo con un pincel o papel de cocina.
Reparte la mitad de la mezcla, añade la mozzarella y reparte la otra mitad de la mezcla encima. Cierra la tapa sin apretar y espera unos minutos hasta que quede crujiente por fuera.
Nota: La opción de dividir la mezcla en 2 mitades y añadir la mozzarella en medio es para poder encontrarte los hilos de queso fundido al romper el gofre. También puedes mezclar la mozzarella con la masa y ponerlo todo de una sola vez.
No hemos puesto cantidad de mozzarella porque será según tus preferencias. A modo de orientación, esta receta contiene 2 cucharadas soperas.
Nosotros hemos utilizado una gofrera en forma de flor (ves el resultado en la foto). Nos ha sobrado masa, así que, mejor ajustar las cantidades según la medida de tu gofrera.
Puedes disfrutar "tal cual" de estos deliciosos gofres o añadir por encima lo que se te ocurra: anchoas, tomate, salmón ahumado, salsa pesto, aguacate (¡también guacamole!), más queso… Incluso, estos gofres pueden ser una buena base para hacer unas mini pizzas.
¿Te animas?