Jalea real, alimento real
La jalea real es una sustancia semilíquida segregada por las abejas más jóvenes de la colmena, las llamadas abejas nodriza (etapa de la abeja obrera comprendida entre los 5 y 14 días de edad). La jalea se produce por la mezcla de dos sustancias secretadas, una por las glándulas hipofaríngeas, y la otra por las glándulas mandibulares que estas jóvenes abejas tienen en sus cabezas. Su textura es de tipo néctar, algo viscoso, de color blanco amarillento y un sabor ácido, así como su olor.
La jalea real es el alimento que todas las larvas de la colmena reciben durante los primeros 3 días. Pero existen 2 diferencias: las larvas de las futuras reinas reciben jalea real pura, mientras que las larvas de las futuras obreras y zánganos la reciben diluida con polen. Además, la jalea destinada a estas últimas es de menor calidad, ya que posee menos concentración en ciertos compuestos (biopterina, neopterina y vitamina B5).
Pasados los 3 días, las futuras reinas seguirán con la dieta exclusiva de jalea real pura. Las otras larvas pasarán a tener un menú que constará de una mezcla de polen, miel y agua.
De hecho, esta dieta será la que determinará que nazcan un tipo de abejas (obreras) u otras (reinas). Que sean infértiles (obreras) o fértiles (reinas). Que vivan hasta 3 meses (obreras) o hasta los 5 años (reinas). Y que sean de tamaño más grande unas (reinas) que las otras (obreras).
Dicho esto, podemos comprobar cuán importante es la jalea real para el equilibrio y supervivencia de una colmena.
Esta extraordinaria influencia que ejerce la jalea sobre el destino de las larvas no ha pasado desapercibida por el ser humano. Numerosos estudios e investigaciones se han llevado y se llevan a cabo para descubrir qué compuesto o compuestos son los responsables de ello y qué beneficios extra puede aportar la jalea real a nuestra salud y calidad de vida.
Composición nutricional de la jalea real
Lo primero que destaca de la jalea real es que se trata de una sustancia bastante ácida. Tiene un pH de 3,5 a 4,5 y no es para nada dulce. Un 65% de su composición es en forma de agua y el 35% restante se encuentra repartido en los siguientes componentes:
- Proteínas 16%: contiene aminoácidos tanto libres como combinados, especialmente ácido aspártico. También contiene gammaglobulinas, que le da las características inmunológicas, y royalactina (o realactina), proteína responsable de la transformación de las larvas alimentadas con jalea real en futuras reinas
- Carbohidratos 13%: en forma de glucosa, fructosa, sacarosa y otros disacáridos
- Lípidos 3%: numerosos ácidos grasos están presentes en la parte lipídica de la jalea real. De especial interés el ácido 10-hidroxi-2-decenoico, con acción antibacteriana. También contiene esteroles
- Vitaminas: se ha podido determinar que la jalea real contiene vitamina A, B1, B2, B3, B5, B6, ácido fólico, B12, C, D, E, que están presentes en cantidades más que destacables.
- Minerales: entre el 2 y el 3% de su composición son minerales en cantidad variable. Calcio, magnesio, hierro, manganeso, potasio, cobre, cobalto, silicio y zinc.
- Hormonas: se ha detectado la presencia de estradiol, testosterona y progesterona
La composición y calidad de la jalea puede variar ligeramente dependiendo de la zona donde se encuentre la colmena, del tipo de abeja de la que se obtenga y de la edad y fortaleza de las abejas nodrizas, responsables de su producción.
Propiedades de la jalea real
Tradicionalmente la jalea real se ha tomado como reconstituyente, energético e inmunoprotector.
Aunque sus funciones van más allá, y parece ser que la jalea real puede tener también propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antibacterianas, antialérgicas, antienvejecimiento y antihipertensivas, entre otras.
Vayamos viendo:
Su actividad como reconstituyente y energético se la debemos a la concentración en carbohidratos, proteínas y vitaminas. Aunque las vitaminas no aportan energía directamente, es decir, no contienen calorías, sí que ejercen un importante papel en el metabolismo de los nutrientes energéticos. Además, las vitaminas del grupo B, con una importante presencia en la jalea real, están también implicadas en la reducción del cansancio y la fatiga, en el normal funcionamiento del sistema nervioso, en la función psicológica y el rendimiento mental. Especialmente el ácido pantoténico (vitamina B5), la vitamina con más concentración en la jalea real.
Visto esto último, podemos determinar que la jalea real es también una muy buena opción frente al sobreesfuerzo físico y mental. Para estudiantes, ayudándolos en la concentración. Para deportistas, a la hora de mejorar el rendimiento. Y durante la primavera, para ayudar a vencer la temida astenia primaveral.
La riqueza nutricional de la jalea es una gran ayuda para promover el crecimiento en niños, así como el apetito, tanto en éstos como en mayores.
Las funciones inmunoprotectoras vienen determinadas por la presencia de gammaglobulinas. Las épocas de cambios de estación, como la primavera, es importante el aporte de jalea real para reforzar nuestro sistema de defensas frente a infecciones.Primavera y otoño son las dos mejores épocas del año para hacer una tanda de consumo de jalea real.
Una mezcla de jalea real con propóleo podría ser efectivo contra las infecciones respiratorias de las vías superiores. Aunque hacen falta más estudios al respecto, parece ser que el contenido de ácido 10-hidroxi-2-decenoico de la jalea, combinado con el ácido cafeico del própolis ejerce una acción sinérgica antimicrobiana y antiinflamatoria.
La actividad antiinflamatoria también se ha visto beneficiosa para el posible tratamiento de afecciones intestinales. Estudios en laboratorio han obtenido resultados positivos con tratamientos orales de jalea real para proteger la mucosa del colon, mostrando como este valioso ingrediente inhibía citocinas proinflamatorias y aumentaba la producción de las antiinflamatorias.
Otros estudios señalan la jalea real como una candidata para ayudar a luchar contra el estrés oxidativo y la diabetes. La primera condición está muy relacionada con el desarrollo y progresión de la segunda. Por su contenido en sustancias biológicamente activas, parece ser que la jalea real actúa afectando los niveles séricos de glucosa, reduciendo el índice de resistencia a la insulina. Además, la jalea real protege contra el estrés oxidativo gracias a la presencia de péptidos antioxidantes.
Los lípidos no se escapan de las fabulosas funciones de la jalea real. Parece ser que ésta sería también efectiva para ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL, el llamado colesterol "malo". Aunque, como todo, se necesitan más estudios para confirmar y establecer unas dosis de consumo, hasta ahora los resultados son alentadores.
La jalea y su relación con la primavera
La primavera es la estación del año que más cambios notamos. A nuestro alrededor parece que todo recobra vida. La naturaleza sale de su letargo invernal y brota de nuevo.
Estos cambios también parece que nuestro cuerpo los nota. De hecho, sobre el 50% de la población es sensible a ello. Aunque de un modo diferente. Mientras el mundo resurge, nuestro estado de ánimo decae. Parece que la energía se nos va… La famosa astenia primaveral ha hecho acto de presencia.
La astenia primaveral se define como un estado de agotamiento sin causa aparente que se manifiesta con mayor cansancio, baja energía, abatimiento, apatía...
Parece ser que el aumento de horas de luz, los cambios de temperatura (que en primavera son más acusados) y el tiempo variable típico de la primavera altera nuestros biorritmos sin dar tiempo a que el cuerpo se adapte a tanto cambio. Es cuando se presentan estas señales.
La jalea real, por su composición, acaba siendo un reconstituyente ideal. Sobre todo cuando la astenia se asocia a alguna carencia nutricional. Su concentración en vitaminas, minerales, la función de sus aminoácidos y ácidos grasos la convierten en nuestro mejor aliado cuando llega la primavera.
Uso y Contraindicaciones
La suplementación con jalea real debe hacerse manteniendo unos períodos de descanso. Así, tomar la jalea por la mañana, en ayunas, ceñirse a las dosis de consumo recomendadas y hacer descansos mensuales (mes sí, mes no), asegura un mejor aprovechamiento de sus propiedades.
Como hemos podido comprobar, las funciones fisiológicas de la jalea son amplias y beneficiosas. Aunque la jalea también puede tener su cara menos amable.
Al igual que sucede con muchos otros compuestos, los efectos menos agradables de la jalea real se deben a dos factores:
- Abuso en la ingesta
- Hipersensibilidad a alguno de sus componentes
Una de las cosas que debemos tener en cuenta en primer lugar es si se tiene una alergia previa a otros productos de las abejas. Si es el caso, desarrollar hipersensibilidad a la jalea está asegurado.
Las manifestaciones alérgicas que pueden aparecer en la hipersensibilidad van desde las manifestaciones cutáneas (eczemas) a una verdadera reacción, el shock anafiláctico.
En cuanto al abuso en la ingesta, como se ha indicado, conviene ceñirse a lo señalado en la dosis de consumo del producto que se haya adquirido. Un elevado consumo puede provocar migraña, palpitaciones e hipertensión, entre otros.
No debemos olvidar que, pese a los grandes hallazgos que se están confirmando sobre las propiedades de la jalea real y los beneficios que podemos obtener. Ya sea una ayuda para regular el colesterol, para controlar los niveles de azúcar, para mejorar las defensas, el rendimiento o como antioxidante, los hábitos saludables deben ser la base de nuestra vida. Evitar los hábitos tóxicos, realizar actividad física regular, llevar una alimentación sana y equilibrada, y mantener una buena salud mental y actitud positiva, son las mejores herramientas para vivir más y mejor.